Descripción del programa:
La Terapia Sistémica Breve (TSB) se la puede definir como un conjunto de procedimientos y técnicas de intervención que pretenden ayudar a los consultantes (individuos, parejas, familias o grupos) a movilizar sus recursos para alcanzar sus objetivos en el menor tiempo posible. Se trata de un enfoque constructivista, que se centra en el contexto interpersonal de los problemas y sus soluciones, y que promueve una colaboración activa con los usuarios. (Herrero, 2016).
La Terapia Sistémica Breve (TSB) abarca tres modelos de intervención, que convergen y se complementan en un gran número de funciones terapéuticas. Al combinarlas dependiendo del caso, el rango de posibilidades teóricas y prácticas se enriquece enormemente. Los tres abordajes para elegir, combinar e integrar son: 1) la escuela sistémica estratégica, creada originalmente por el Mental Research Institute (MRI) en Palo Alto, California; 2) la terapia centrada en soluciones (TCS), creada por Steve de Shazer e Insoo Kim Berg, en Milwaukee, Wisconsin, y 3) el enfoque narrativo (TN), encabezado por Michael White en Australia y David Epston en Nueva Zelanda (Falicov, 2016). Cada uno de estos tres modelos suplementa las posibles debilidades o insuficiencias técnicas de los otros dos. Así, el énfasis de TCS y MRI en establecer objetivos claros y cuantificables, que puede por momentos parecer excesivamente reduccionista, se ve compensado por la apertura a lo emocional de la TN.
Por otro lado, la tendencia en la terapia MRI de centrar la conversación terapéutica sobre el presente se equilibra con la preferencia de la TCS por conversar sobre el futuro, y se ve enriquecida por la incorporación desde la TN de los elementos del pasado biográfico. Además, la relativa parquedad de las maniobras de validación y empatía en TCS y MRI puede complementarse con la validación expresa de historias de sufrimiento en la que son maestros los terapeutas narrativos (Beyebach, 2015). En este modelo de trabajo psicoterapéutico, “breve” significa optimizar el trabajo terapéutico, de modo que lo que ahí se trabaja efectivamente contribuya a resolver los problemas de nuestros clientes. Por tal motivo, probablemente no se promueven conversaciones que profundicen en las heridas causadas por los problemas, ni en los antepasados remotos de los problemas actuales, ni en la estructura profunda que explica el comportamiento de las personas; tampoco ocuparemos largas e interminables sesiones en procesos psicodiagnósticos aplicando una prueba tras otra sin un sentido aparente o tratando de encajar al cliente en una categoría nosológica, tipo DSM (García, 2016).
La Terapia Sistémica Breve (TSB) constituye un modelo integrador efectivo para la intervención psicoterapéutica en diversos problemas, es de aplicación rápida y dinámica, los consultantes se acoplan al proceso acompasado del terapeuta y constituye un método que se basa en evidencia, para la construcción de técnicas y modelos de intervención.
Valoraciones