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Escuela en Psicología Comunitaria

Día Internacional de los Voluntarios: el compromiso social como motor de formación profesional

En el Día Internacional de los Voluntarios reflexionamos sobre el rol del voluntariado en la formación de profesionales del ámbito psicosocial.

Contenido

  1. El voluntariado como herramienta formativa en el ámbito psicosocial
  2. Psicología comunitaria y territorio
  3. Liderazgo emocional en escenarios vulnerables
  4. Una práctica transversal y continua
Día Internacional de los Voluntarios: el compromiso social como motor de formación profesional

En el marco del Día Internacional de los Voluntarios, conversamos con Natalia Leyton Echeverría, psicóloga y Content Coordinator de Adipa, para profundizar en el rol del voluntariado en la formación de profesionales del ámbito psicosocial. Natalia es cofundadora de la Fundación JOCAM y ha liderado múltiples iniciativas de cooperación y liderazgo juvenil en Chile y América Latina.

Con una destacada trayectoria en participación comunitaria, la psicóloga plantea que esta práctica no solo fortalece el vínculo con las comunidades, sino que también consolida una ética profesional basada en la sensibilidad, el propósito y la acción transformadora.

El voluntariado como herramienta formativa en el ámbito psicosocial

El voluntariado cumple un rol estratégico en la formación de profesionales del ámbito psicosocial. Desde la experiencia de Natalia, se configura como un espacio de perfeccionamiento personal y profesional.

“El voluntariado es un espacio de perfeccionamiento profesional y personal desde una visión profundamente vocacional”, señala Leyton. En su experiencia, participar en este tipo de instancias permite identificar habilidades, explorar intereses y descubrir la mejor versión de cada persona.

Desde una perspectiva académica, el voluntariado cumple un rol estratégico en la formación integral: “Nos prepara para el mundo laboral sin perder el corazón ni el origen de por qué elegimos esta carrera”, afirma.

Psicología comunitaria y territorio

Uno de los aportes centrales del voluntariado es su vínculo con la realidad social. En palabras de la psicóloga, “el voluntariado nos sitúa en ese territorio real, y a veces crudo, que no aparece de la misma forma en los libros”. Esta dimensión práctica resulta clave en disciplinas como la psicología comunitaria, donde la intervención requiere comprender contextos, dinámicas colectivas y recursos locales.

“El rol del psicólogo comunitario es guiar, entregar herramientas y fortalecer a la comunidad para que pueda sostener el proyecto sin depender del profesional”, sostiene. Esta aproximación no solo fortalece a las comunidades, sino que también mejora la capacidad clínica: “Estar en terreno afina el ojo clínico, permite ajustar las intervenciones con mayor precisión y humanidad”.

Liderazgo emocional en escenarios vulnerables

Acompañar equipos en contextos de alta vulnerabilidad implica desafíos emocionales importantes. Frustración, sobrecarga y sentimientos de impotencia son experiencias comunes que requieren contención emocional y liderazgo consciente.

“Siempre les digo algo que resume esta experiencia: estar en este entorno es elegir ser protagonistas de los cambios y no espectadores”, explica Natalia. En este sentido, enfatiza la importancia de construir equipos sostenidos por el propósito, con una mirada colectiva del trabajo, evitando la sobreexigencia individual.

Una práctica transversal y continua

El rol de los psicólogos voluntarios ha cobrado especial relevancia en la última década, tanto en procesos formativos como en intervenciones territoriales. No obstante, es importante que el voluntariado no se asocie exclusivamente a la juventud. “El voluntariado no tiene edad. En todas las etapas aporta algo distinto y necesario”, indica.

“Si Chile, y el mundo, integrara el voluntariado como parte de la formación, tendríamos no solo mejores técnicos, sino mejores seres humanos”, afirma.

En esta fecha, la profesional hace un llamado directo a la acción: “Mi invitación es simple: atrévanse a ser parte. A formar parte del cambio que quieren ver en el mundo”. Desde su visión, el voluntariado es una plataforma real de transformación social, capaz de reconectar a los profesionales con su vocación y propósito original.

“No se necesita perfección; se necesita disposición, presencia y vocación”, concluye. Citando a Eduardo Galeano, recuerda que “mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo”.

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